Cada cinco años, la ISP celebra un Congreso Mundial donde debatimos y decidimos cómo reforzar nuestras actividades y capacidad organizativa.
El Programa de Acción (PdA) 2018-22, titulado El Pueblo por Encima del Lucro, guiará nuestra acción global, en todas las áreas de la política y actividad de la ISP, por un período de cinco años. El PdA se ha mantenido lo más corto posible. Una vez que haya sido aprobado por el Congreso, se producirá un breve resumen para que los afiliados lo utilicen para explicar el trabajo y las prioridades de la ISP al personal y los miembros, centrándose en cómo el trabajo internacional afecta su vida cotidiana.
Resumen de los puntos clave
El PdA propuesto se basa en las prioridades políticas actuales de la ISP.
La sección 1, Introducción, describe las amenazas y oportunidades internacionales a las que se enfrentan la ISP, sus organizaciones afiliadas y miembros. Recuerda que la lucha de la ISP no se puede separar de las luchas más amplias de todos/as los/as trabajadores/as, ni de las luchas por la democracia, los derechos humanos y la justicia para todos/as. A continuación, describe las amenazas del poder de las empresas, el aumento de las desigualdades, el racismo y la xenofobia y el lugar único que ocupan los/as trabajadores/as de los servicios públicos y los sindicatos en la crisis mundial actual. Sostiene que debemos tener una visión audaz y estar dispuestos a liderar.
La sección 2, Dotarse de los medios necesarios para crear el mundo que queremos, describe la importancia de desarrollar nuestro poder para generar cambios. Identifica la sindicalización de los/as trabajadores/as, el desarrollo de nuestros sindicatos y la afirmación de nuestra presencia como elementos esenciales de nuestro éxito. Describe cómo el poder dela ISP depende de forma crítica del tamaño, la unidad y la actividad de nuestras organizaciones afiliadas. A raíz de la solicitud formulada en la reunión EB-149 (celebrada en noviembre de 2016), todas las secciones del PdA contienen acciones que las organizaciones afiliadas a la ISP deben realizar. La sección 2 defiende la democracia interna y la participación de los/as trabajadores/as, para garantizar que todos/as los/as trabajadores/as sean incluidos en el movimiento sindical, y la creación de alianzas más grandes de usuarios de servicios públicos, sindicatos del sector privado y otros aliados. Preconiza un análisis claro, reivindicaciones audaces, la educación de los/as trabajadores/as y una comunicación y actividades de presión eficaces.
La sección 3, Respeto y dignidad para todos/as, describe nuestro compromiso con el respeto y la dignidad para todos/as. Defiende que se reconozca la injusticia histórica, se ponga fin a todo tipo de discriminación, se adopten medidas específicas para remediar la injusticia y la importancia de redistribuir el poder en la sociedad. Incluye nuevas secciones sobre migrantes y refugiados, racismo y xenofobia, trabajadores/as LGBTQI, pueblos indígenas y trabajadores/as con discapacidades. Reconoce el papel de liderazgo del Comité de Mujeres de la ISP en la incorporación de la dimensión de género, pero también que los hombres deben desempeñar un papel sumamente importante. Se compromete a ampliar el apoyo a los/as trabajadores/as jóvenes en la toma de decisiones de la ISP y su papel central en las actividades de la ISP.
La sección 4, Una economía mundial justa, expone la visión de la ISP para una economía mundial alternativa y justa. Articula los retos del aumento de las desigualdades, los cambios en el mercado de trabajo, el aumento escandaloso del poder de las empresas y el papel que desempeñan las instituciones financieras internacionales en el mantenimiento de las políticas y las prácticas neoliberales. Esta sección aborda la justicia fiscal, la deuda, el comercio, la corrupción, el desarrollo sostenible, el cambio climático, las pensiones y la digitalización.
La sección 5, Derechos sindicales y laborales, describe el papel fundamental que la ISP desempeña en la defensa de los derechos sindicales de sus organizaciones afiliadas ante ataques sin precedentes, en particular a la negociación colectiva y al derecho de huelga en los servicios públicos. Describe cómo la ISP ayudará a defender y ampliar estos derechos para garantizar que los/as trabajadores/as pueden ejercer sus derechos humanos y mejorar sus salarios y condiciones.
La sección 6, Lucha contra la privatización, reitera el compromiso de la ISP con los servicios públicos de calidad y su papel a la hora de asistir a las personas más vulnerables y necesitadas de la sociedad. Describe los derechos humanos, la justicia social y la lógica económica a favor de los servicios públicos de calidad, así como las amenazas planteadas por la privatización y cómo las superaremos.
La sección 7, Fortalecimiento de los sectores, detalla el papel importante de los sectores en la lucha de la ISP. Describe cómo las cuestiones de igualdad, las cuestiones transversales, la privatización y los derechos sindicales se incorporarán e impulsarán a través del trabajo sectorial. Establece cómo las redes sectoriales serán reforzadas y cómo la ISP se organizará para defender a sus organizaciones afiliadas y sus miembros. Enumera acciones específicas para cada uno de los cinco sectores de la ISP.
El Tema del Congreso
Siguiendo la tradición de la ISP de rendir homenaje al país anfitrión del Congreso, tuvimos el reto de encontrar algo peculiar en Suiza que pudiera también destacar un logro histórico: nuestro 110º aniversario y el 30º Congreso.
Y así reuniremos dos elementos temáticos contemporáneos de la ISP: el dadaísmo, un movimiento de arte suizo que acaba de celebrar su centenario; y el constructivismo, una praxis política artística intrínsecamente ligada a la primera revolución obrera – que también celebra los 100 años – que alaba al arte como herramienta de cambio social.
Suiza, 1916: un grupo de artistas, marginados, exiliados políticos y revolucionarios se reúnen para crear el movimiento dadá. Para los dadaístas, el lenguaje y las imágenes del orden político establecido y de la clase dirigente es, simplemente, un sinsentido total
El Dadá, como un movimiento, comenzó en Zúrich en 1916 como una reacción a los horrores de la Primera Guerra Mundial. Sus defensores rechazaron la «razón», la «lógica» y la «racionalidad» de la sociedad burguesa capitalista que había provocado la muerte sin sentido de millones de personas en el campo de batalla. Los dadaístas optaron por expresiones de tonterías, ironía, caos, iconoclasia y absurdo como forma de expresar su oposición. Usando el colage, la poesía sonora, y la escritura cut-up, los dadaístas se opusieron vigorosamente a las normas y ortodoxias de su tiempo.
El hecho es que, un siglo más tarde, en un tiempo en el cual la publicidad bombardea implacablemente nuestros ojos con imágenes imposibles, un tiempo en el cual políticos petulantes gritan no-verdades y tonterías, en un tiempo en el cual ideas económicas desde hace mucho tiempo muertas son lanzadas y adoradas… En nuestro tiempo el rechazo dadaísta de la ortodoxia permanece más relevante que nunca.